En un mundo cada vez más digitalizado, donde los niños pasan una parte significativa de su tiempo en línea, plataformas como Roblox se han convertido en el centro de atención. Con más de 150 millones de usuarios activos al mes, este videojuego ha sido aclamado por su capacidad para permitir la creatividad de los menores y su interacción en mundos virtuales. Sin embargo, bajo su apariencia inofensiva, surge una preocupación creciente entre padres, pediatras y fiscales: ¿realmente Roblox está haciendo lo suficiente para proteger a los menores de los peligros que acechan en su espacio digital?
La controversia: menores y adultos en el mismo espacio
Roblox ofrece una experiencia única en la que los usuarios pueden crear, compartir y jugar en entornos interactivos. Pero lo que parecía ser un refugio virtual para niños se ha convertido en un terreno fértil para comportamientos peligrosos. Casi el 40% de los usuarios de Roblox tienen menos de 13 años, y, aunque la plataforma cuenta con controles de seguridad como el monitoreo de chat por inteligencia artificial, no exige verificación de edad para los usuarios adultos. Esto ha permitido que depredadores, acosos y estafas florezcan sin demasiadas barreras.
El reciente informe de la Policía Nacional de España destaca una alarmante cantidad de investigaciones relacionadas con delitos como el abuso sexual y la incitación al suicidio a través de la plataforma. A pesar de que Roblox no es la única plataforma que enfrenta estos problemas, su popularidad y el hecho de que no haya una verificación de identidad estricta para adultos la colocan en el centro de la controversia.
A raíz de estos incidentes, Roblox ha introducido medidas como la verificación facial de los usuarios para que los menores puedan ser agrupados por edades y limitar las interacciones con adultos. Sin embargo, como ya ha quedado claro en otros entornos digitales, el fraude y la evasión de sistemas de control son parte del modus operandi de quienes buscan explotar a los más vulnerables. Además, el sistema de verificación todavía está en fase de implementación y no será obligatorio en todos los mercados hasta principios de 2024.
El impacto psicológico en los menores: una realidad invisible
Los pediatras y expertos en salud mental advierten sobre los daños emocionales que pueden derivarse del uso descontrolado de plataformas como Roblox. Los síntomas de ansiedad, insomnio y retraimiento social están comenzando a ser comunes en niños y adolescentes que pasan demasiado tiempo en estos entornos virtuales. La moneda virtual de Roblox, los Robux, también se ha convertido en una herramienta de manipulación para estafadores, que incitan a los menores a hacer compras dentro del juego o incluso a desactivar los controles parentales.
María Angustias Salmerón, pediatra y miembro del Comité de Promoción de la Salud, asegura que los síntomas observados en sus consultas van más allá de lo que se podría considerar normal. Su recomendación es clara: los padres deben actuar proactivamente, supervisando qué tipo de interacciones tienen sus hijos en línea y aplicando medidas como el control parental para limitar el tiempo de juego y las interacciones con otros usuarios. A pesar de las advertencias, muchos desconocen los recursos disponibles para evitar que sus hijos caigan en estos riesgos.
La responsabilidad de Roblox: más allá de las promesas
Si bien la empresa ha tomado algunas medidas, como la implementación de un sistema de verificación de edad y el monitoreo de las comunicaciones entre usuarios, su actuación sigue siendo vista como insuficiente. La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha abierto una investigación sobre la plataforma debido a los posibles riesgos que presenta en cuanto al manejo de datos personales y al acceso a contenidos inapropiados. Sin embargo, según un informe reciente de la organización británica Revealing Reality, la verificación de edad sigue siendo insuficiente y los sistemas de moderación no son completamente efectivos para evitar que adultos se infiltren en los espacios destinados a menores.
La situación plantea un dilema crucial: la compañía, en su afán de seguir siendo atractiva para una amplia base de usuarios, parece haber descuidado las medidas de seguridad más estrictas. La solución no radica únicamente en los filtros de acceso, sino en la creación de un entorno virtual verdaderamente seguro, donde los menores estén protegidos por una moderación más efectiva y protocolos más estrictos en la creación de contenido y la interacción entre usuarios.
La urgencia de una regulación eficaz
Es evidente que el diseño de plataformas digitales como Roblox necesita un enfoque más serio en términos de protección infantil. No basta con que la empresa implemente medidas de seguridad parciales o que promueva herramientas de verificación que, como hemos visto, pueden ser fácilmente eludidas. Las autoridades deben colaborar para establecer normativas globales que regulen más allá de los intereses comerciales, garantizando la seguridad de los más vulnerables.
Es responsabilidad de todos —desarrolladores, reguladores y padres— velar por la integridad de los menores en los entornos virtuales. En el caso de Roblox, las soluciones deben ir más allá de promesas. Es hora de que la plataforma se comprometa de manera firme a crear un espacio verdaderamente seguro para aquellos que, al final del día, son los más indefensos en este mar de datos y conexiones. @mundiario