Tanto si tu coche es una parte esencial de tu día a día como si solo lo usas los fines de semana, hacerle una revisión completa no es una opción: es una inversión en seguridad y en evitar averías costosas.
Pero ¿cada cuánto conviene hacerla? ¿Y qué debe revisar un taller profesional? Las recomendaciones de organismos como la DGT, AECA-ITV y clubes automovilísticos como RACE y RACC ofrecen las respuestas a estas preguntas.
A veces no es una avería ni un testigo encendido lo que te recuerda que toca pasar la revisión del coche, sino algo más sutil: un ruido que no estaba ahí ayer, un viaje que se acerca o simplemente esa intuición de que es mejor prevenir que quedarse tirado en la carretera.
¿Cuándo conviene hacer una revisión completa?
Los principales organismos y asociaciones coinciden en que revisar el coche con criterio y a tiempo es una de las formas más efectivas de evitar problemas costosos y de conducir con tranquilidad.
La DGT insiste en seguir el libro de mantenimiento del fabricante y registrar las intervenciones en el libro taller electrónico, una herramienta que centraliza el historial del vehículo y facilita comprobar si todo está en orden.
Pero no hace falta esperar al kilometraje exacto para pasar por el taller. Tanto RACE como RACC recomiendan hacerlo antes de un viaje largo, especialmente en vacaciones, si notas vibraciones, ruidos nuevos o testigos en el cuadro o, simplemente, para preparar el coche antes de ir a la ITV y, así, detectar defectos previos que AECA-ITV considera habituales, como los frenos, luces, neumáticos y emisiones.
No obstante hay veces que, simplemente, toca hacerla porque ya ha pasado el tiempo indicado por el fabricante, aunque no se hayan rodado los kilómetros reflejados en el libro de mantenimiento.
¿Qué revisan exactamente en una revisión completa?
Aunque cada taller sigue su propio método, hay puntos clave que se repiten en todas las guías de seguridad